📈 ¿Desmovilización de la izquierda? No tan rápido
Análisis de las encuestas y datos PRECISA apuntan a que la tasa de fidelidad de las fuerzas de la oposición suelen ser más altas, pero el Gobierno tampoco sufre demasiadas fugas.
👋 Hey, ¿cómo va eso?
Mi nombre es Endika Nuñez y en esta newsletter, La Review, compartiré contigo un análisis semanal de la actualidad a partir de los datos.
La newsletter de esta semana lo envío un domingo al mediodía. Por su carácter excepcional, me centraré solamente en el análisis principal.
Hablaremos de la perspectiva electoral de la izquierda. ¿Qué dicen las encuestas? ¿Hay desmovilización en la izquierda como apuntan muchos analistas? No lo des por sentado.
Vamos allá.
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💡 Spotlight: “La izquierda está desmovilizada, pero no tanto como crees”
Llevamos meses viendo cómo la izquierda —PSOE, UP y MP— no es capaz de remontar en las encuestas. Si bien el sorpasso del Partido Popular al Partido Socialista se produjo a partir de la victoria de Isabel D. Ayuso en las pasadas elecciones madrileñas, el bloque de la derecha —PP, Vox y Cs— lleva liderando las encuestas desde, al menos, un año antes.
Actualmente, la izquierda en su conjunto está por debajo del 40% de los votos, 7 puntos por debajo de la derecha y 3 puntos por debajo de los últimos cuatro resultados electorales.
Según varios analistas, esto se debe principalmente a la desmovilización de los partidos de la izquierda. Marta Marcos, consultora de comunicación en GAD3, apunta a InfoLibre que la “desilusión y las tensiones en el seno del Gobierno” han desmovilizado a las fuerzas progresistas.
Por otro lado, José Pablo Ferrándiz, director de la consultoría Elemental Research, apunta al mismo medio que la desmovilización de la izquierda es algo coyuntural y apunta a una mayor “movilización de la derecha porque no están en el gobierno”.
Esto tiene cierto sentido. Las bases de los partidos de la derecha están movilizadas porque quieren derrocar al Gobierno de coalición, siendo esta su máxima prioridad, mientras que la izquierda trata de sacar adelante su agenda de políticas públicas y agotar la legislatura. No tienen prisas.
Lo cierto es que muchos analistas coinciden en que la izquierda está desmovilizada, aunque discrepen en los motivos que lo acarrean. Una encuesta reciente de IMOP/El Confidencial, apunta a una fidelidad del 75% para el PP y alrededor de 69% para el PSOE, con aproximadamente un 7% de los socialistas de 2019 que apostarían por el partido conservador.
Y esto es importante. En los últimos años se ha constatado que existen pocos flujos entre los bloques izquierda y derecha, por lo que estos trasvases rompen la dinámica entre los bloques y pueden acarrear cambios significativos en las próximas generales.
De nuevo, estas cifras varían en función de la encuesta que se consulte. Según un sondeo de NC Report/La Razón, encuestadora que tiende a sobreestimar las opciones conservadoras, los trasvases entre el PP y PSOE rondarían el 5%, lo cual no supone ningún drama para el bloque que gobierna.
Según PRECISA, un análisis a partir de los microdatos del CIS, dichos trasvases podrían rondar el 3% de voto, y, como hemos ido viendo en los últimos tiempos, el PP se nutre principalmente de la caída de Cs (1 de 4 exvotantes de 2019 optaría por el PP) y de Vox (1 de 10).
Volviendo a las palabras de Ferrándiz, lo que si parece que ocurre es que, históricamente hablando, los partidos de la oposición han solido mantener tasas de fidelidad superiores que los partidos que conforman el Gobierno.
Como se puede apreciar en la gráfica de arriba, la tasa de fidelidad de los partidos de la oposición suelen ser más estables. Esto se puede ver con claridad en las legislaturas V, VII, VIII o IX, con gobiernos de alternancia entre el PP y el PSOE.
Pero también existen excepciones.
En la legislatura X, con la irrupción de Podemos y Ciudadanos en la esfera política estatal, la fidelidad de voto cambia drásticamente con grandes flujos de votantes entre viejos y nuevos partidos.
Otra excepción es la legislatura XII. La fidelidad del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez mejora tras la moción de censura contra Mariano Rajoy, tras la cual el PP pasa a formar parte de la oposición.
Lo que no tengo claro es que la izquierda esté “tan” desmovilizada, unos puntos si acaso. Según mi propio análisis, el 7% de los votantes socialistas de 2019 no acudirían a las urnas en esta ocasión y el 6-7% de los votantes de Unidas Podemos. En el bloque de la derecha, en cambio, esas transferencias se reducen a 5%, tanto para el PP como para Vox.
Estas diferencias no son especialmente altas, sobre todo cuando no hay elecciones convocadas ni expectativas para ir a votar a corto plazo.
Además, las tasas de fidelidad de la actual legislatura —tal y como se puede ver en la gráfica de arriba— no difieren tanto entre bloques y podría decirse que están igualados, aunque es cierto que las fuerzas del Gobierno han perdido fieles en los últimos tiempos.
Por último, sí que hay que tener en cuenta que una mayoría absoluta de la derecha pasa por superar con creces a la izquierda. Pero no al reves. La izquierda, aunque por ahora fragmentada, tan solo necesita recortar 2-3 puntos a la derecha para gobernar, ya que mantiene buenas relaciones con partidos no estatales, y conocemos que las distancias se estrechan cuando se acercan las elecciones.
🍆 El berenjenal
En la newsletter de la semana pasada os hablé del proyecto PRECISA y anticipé que se publicaría a inicios de esta semana. No ha sido así y os pido disculpas.
El proyecto está listo para su publicación y, mientras tanto, vamos adelantando los próximos capítulos (sí, son unos cuantos).
No deberíamos de tardar mucho más en hacerlo público, no más de otra semana, pero os digo una cosa:
Si necesitáis los datos para hacer algún análisis o publicar alguna pieza, pídenoslo y os lo facilitaremos.
👋 Esto ha sido todo por hoy, nos leemos la semana que viene. Buen domingo e inicio de semana.
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