👋 Hey, ¿cómo va eso?
Mi nombre es Endika Nuñez y en esta newsletter, La Review, compartiré contigo un análisis semanal de la actualidad a partir de los datos.
Esta semana cerraremos el tema que nos ha llevado mucho tiempo en los últimos meses: la carrera electoral en Castilla y León.
Os recomiendo encarecidamente que escuchéis el PODCAST que se adjunta en esta newsletter. Una conversación con Daniel V. Guisado y Eduardo Bayón sobre las elecciones en Cyl., con muchas claves para entender todo lo que puede pasar este fin de semana y las implicaciones que pueda tener a partir de ahora en la política española.
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💡Spotlight: “Votos, escaños y probabilidades”
En este espacio se ha analizado con mucho detalle y profundidad la carrera electoral en Castilla y León. Hoy, aprovecharé para dar alguna clave más:
Se nota cierto nerviosismo en las filas del PP y, cada vez más, la percepción es que la campaña no le está yendo especialmente bien. Han movilizado a todo el partido —desde coadros intermedios hasta expresidentes— buscando el empujón final de campaña y han agitado todos los fantasmas que han podido para tratar de frenar la pérdida de apoyos paulatina que estaban sufriendo desde que Mañueco adelantara las elecciones.
El PP ha cambiado de estrategia a última hora. Ahora, la consigna no es confrontar directamente con Pedro Sánchez y el Gobierno — al más puro estilo Ayuso en Mad.—, sino hablar de los temas que más preocupan a los castellanos y leoneses.
La prohibición de publicar las encuestas no nos deja ver cómo se están moviendo las tendencias en los últimos días. La imagen es borrosa, pero los nervios y cambios de estrategia por parte del PP vienen propiciados por la fuerza que está acumulando su principal competidor en la derecha: Vox.
La tendencia para el partido de ultraderecha es positiva, los únicos que crecen en intención de voto en los últimos días (con el permiso de EV).
Una de las claves será cómo termina siendo la correlación de fuerzas dentro del bloque de la derecha. La diferencia que habrá entre el PP y Vox nos puede resolver muchas incógnitas, sobre todo en lo que se refiere a la formación de gobierno. ¿Será un apoyo externo? ¿Querrá Vox formar parte del ejecutivo?
Los sondeos dicen que la izquierda no tiene apenas posibilidades de sumar una mayoría alternativa, pero los sondeos durante la prohibición LOREG son escasos y la información que se dispone es muy ruidosa. Para que un escenario de esa naturaleza sea posible parece que tendría que haber notables cambios en la participación y una movilización desigual por bloques ideológicos.
Bonus: esta es la estimación alternativa que hemos realizado a partir de los microdatos del barómetro preelectoral del CIS (7—22 de enero).
📰 Algunas publicaciones más
Empecé por una primera lectura de las encuestas a finales de diciembre, unos días después de la convocatoria anticipada de elecciones. 24 de diciembre.
Hablé de las dificultades que las encuestadoras estaban teniendo a la hora de medir las corrientes de fondo en provincias menos pobladas. Hablamos con Narciso Michavila que nos ofreció algunas claves que aún siguen vigentes. 22 de enero.
Repasamos el escenario que apuntaban las encuestas al inicio de la campaña electoral y lo complicado que empezaba ser para Mañueco estar por debajo de las expecativas que ellos mismo tenían. 29 de enero y 31 de enero en elDiario.es
Analicé al detalle cómo se articulaba el voto para España Vaciada: dónde era más fuerte y dónde menos; cuántos escaños podrían conseguir y cómo podría cambiar la dinámica del voto. 4 de febrero en elDiario.es.
También publicamos una última proyección antes de la prohibición de la LOREG de difundir los sondeos. 7 de febrero en elDiario.es.
📊 Encuesta random de la semana
Hace un par de días Daniel V. Guisado publicó este gráfico de Metroscopia en su cuenta de Twitter sobre la Reforma Laboral.
Lo más interesante, me parece, es la comparativa que se hace del pasado mes de noviembre, antes de conocer el acuerdo final de la reforma que se oficializó en diciembre, y febrero, durante la semana de la convalidación del Real Decreto en el Congreso.
Varias reflexiones rápidas:
La percepción de la opinión pública sobre el impacto de esta Reforma Laboral (la de febrero, no la que se hablaba en noviembre1) en la economía mejora tras tras el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y los agentes sociales. Sobre todo por lo positivo que se percibe para las empresas, aunque la percepción sobre el impacto entre los trabajadores continúe estable.
El acuerdo final es de mínimos si comparamos con las expectativas que se tenían de ella (derogación completa primero, aspectos más lesivos después), sobre todo entre el electorado progresista. Pero es una reforma que no es regresiva (es decir, recupera derechos), aunque eso no se consigue trasladar a la opinión pública como una mejora para los trabajadores.
La lectura que hago es que la Reforma Laboral se considere muy positivo para la empresa no significa que sea muy negativo para los trabajadores. Esto “confirma que pueden haber políticas y legislaciones que rompan la supuesta suma cero empresa-trabajador”, añadía Guisado a mis reflexiones.
🍆 El berenjenal
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El pasado mes de noviembre se podía intuir que la nueva Reforma Laboral no iba a derogar, por completo, la reforma de 2012, pero no se conocían los términos del acuerdo final entre el Gobierno y los agentes sociales.
🗳️ Castilla y León: La hora de votar